Así es el yacimiento de Numancia

La historia de la ciudad de Numancia (Soria) siempre me había llamado la atención por su fama y férrea resistencia. Es por ello que en cuanto tuve la oportunidad decidí conocer in situ el yacimiento de tan renombrada urbe. Ciertamente es complicado hacerse una idea de lo que pudo ser aquel enclave, pues las ruinas actuales apenas muestran el entramado de las calles que la formaron. Sin embargo, si te gusta la historia y conocer de cerca esta emblemática ciudad, sí te recomiendo que acudas a este yacimiento arqueológico porque descubrirás detalles que de otro modo probablemente te pasarían desapercibidos.

Vídeo del Yacimiento de Numancia

Breve historia de Numancia

La visita al Yacimiento de Numancia se puede hacer por libre o con un guía, que es un técnico- arqueólogo que integra el equipo de investigación. Dura entre 75 y 90 minutos, y es bastante extensa y detallada. Si decides hacerla por tu cuenta el recorrido posee paneles explicativos en los puntos significativos.

Numancia se eleva sobre el cerro de La Muela de Garray en Soria, desde el que se contempla una extensa llanura rodeada por las montañas del Sistema Ibérico. Su ubicación era estratégica pues desde aquí se controlaban los caminos que comunicaban el Valle del Ebro con el Alto Duero.

Numancia se eleva sobre el cerro de La Muela de Garray en Soria.

Las excavaciones descubrieron el trazado de dos ciudades, una inicial de origen celtibérico y otra romana, que se amoldó a la estructura de la original.

Para mí uno de los aspectos más interesantes que te muestran en el Yacimiento es el cerco que hizo Publio Cornelio Escipión a Numancia.Roma tuvo recurrir a este famoso general que venció en la Segunda Guerra Púnica al que parecía hasta entonces invencible cartaginés Aníbal, para acabar con la resistencia de los numantinos.

Tras veinte años de intentos frustrados para conquistar Numancia en el mes de octubre del 134 antes de Cristo, Escipión emprendió su particular gesta contra la ciudad mediante su aislamiento. Para ello la cercó alrededor con siete campamentos situados en los cerros que la rodeaban y que a día de hoy se pueden ver gracias a unos hitos blancos que los identifican. Todos ellos quedaron unidos por un muro de 9 kilómetros de perímetro. En las confluencias del río Duero con el Tera y el Merdancho, estableció además pequeños fortines con rastrillos.

Esta configuración se puede ver claramente en un panel explicativo y en un mapa plano que hay tallado sobre una piedra.

Tras once meses de asedio en el verano del 133 a. C., Numancia cae.

Ahora bien, los numantinos protegían los límites de su urbe con una muralla bien sólida y reforzada mediante torreones. De hecho, hay una reconstrucción de la misma en la puerta norte, nada más entrar al Yacimiento.

Tras once meses de asedio en el verano del 133 a. C., los 4.000 numantinos caen ante los cerca de 60.000 atacantes romanos entre legionarios y tropas auxiliares. No obstante, muchos de ellos se quitaron la vida y antes de que entraran por completo en la ciudad provocaron un incendio. Los supervivientes se vendieron como esclavos.

Visita al yacimiento

En la visita lo primero que se ve es el monumento inacabado a los héroes de Numancia (1842), que se erige sobre un caldarium doble (sala de baños caliente) de unas pequeñas termas de la ciudad de época romana. En esta misma zona se aprecia también el monolito conmemorativo del “Ejército de Tierra a los héroes de la gesta de Numancia en el 2150 aniversario y a los que, a lo largo de todos los tiempos, dieron su vida por España”, tal y como reza en una placa.

El trazado de las calles se diseñó siguiendo un patrón específico para guarecerse del viento.

La planificación urbana es curiosa porque el trazado de las calles se diseñó siguiendo un patrón específico para guarecerse del viento, extremo y muy frío en esa zona de Soria. En primer lugar, crearon un mayor número de calles en dirección Este-Oeste, y después unieron sus tramos escalonadamente para cortar el aire. Luego, agruparon sus casas en manzanas.

Como ya he comentado, sobre la ciudad celtíbera se levantó la romana, pero introduciendo mejoras. Se construyeron casas más grandes y desagües cubiertos por lajas de piedra.

Por el paseo se ven también aljibes o depósitos de piedra excavados en el manto natural arcilloso que les confería impermeabilidad. Se colocaban en los patios de las casas para uso particular o en las esquinas si eran para la comunidad.

Reconstrucciones

El yacimiento de Numancia muestra la reconstrucción de dos casas: una romana y otra celtibera. La primera que aparece es la de época romana, cuyo tamaño era superior a las de los celtiberos. Estas casas eran de piedra y de cubierta vegetal. Al entrar se ve un vestíbulo con los molinos de mano y el telar, la cocina y las habitaciones. Por último, se aprecia el granero y el almacén que concluye en un corral externo.

A continuación, se halla un segundo tramo reconstruido de la muralla. En algunos casos las casas se adosaban al muro, pero en otros, como en este, se dejaba una estrecha calle de ronda. Desde lo alto de la muralla se aprecia el control que ejercían los numantinos sobre los alrededores.

La casa celtibera que se muestra es de madera, adobe y de techumbre vegetal.

La casa celtibera que se muestra es de madera, adobe y de techumbre vegetal. Su planta es rectangular y posee tres estancias: la destinada a las labores artesanales con una trampilla en suelo para bajar a la bodega, una habitación central o lugar de reunión familiar y una despensa en la zona trasera. También disponían de un pequeño cobertizo para los animales.

Por el trayecto marcado se accede finalmente al barrio sur, que era la zona de la ciudad más agradable para vivir. Aquí es donde se establecieron los romanos más acomodados y donde desarrollaron un barrio con estancias más al estilo del gusto romano con casas porticadas con columnas. Esto se ve claramente en la “casa de las columnas” donde se aprecia un pórtico con forma de «L».